El presidente de Club Deportes habló de todo. Del proyecto, de las desventajas económicas que enfrentó el 2020, del acercamiento con la ciudad, los objetivos para este nuevo año y de la permanencia en Primera A. Adelanta que esto es sólo el inicio y que el entorno del fútbol “se empieza a fijar en cómo trabajamos todos los estamentos. En 3 años pasamos de estar en la B a animar la máxima categoría, ganamos el clásico, superamos de visita a Colo Colo y en paralelo hemos ido dando un nuevo aire a todo lo que hacemos: desde cuidar a quién vamos a tener en nuestra camiseta hasta cómo se interactúa en un club moderno y cercano a su comunidad”.
El 2020…
¿Cómo evalúa el año pasado?
Fue un año muy difícil para todos. También fue muy emotivo por el ascenso y a la vez muy exigente debido a las pocas semanas que tuvimos de preparación, donde no hubo igualdad de condiciones para contratar refuerzos. Luego la paralización del torneo por el Covid-19…Además, teníamos un ingreso por derechos de televisión mucho menor que el resto de los clubes, y esas eran nuestras herramientas para competir. A veces se nos olvida que el 2020 tuvimos la mitad del presupuesto que los otros competidores. Así y todo, mantuvimos la categoría, seguimos dando estructura a nuestra organización, reestablecimos las comunicaciones con la comunidad y a pesar de no poder recibir a los hinchas en La Portada, hemos sentido el cariño.
¿Cómo explica el segundo aire que tuvo el equipo? Fue una apuesta arriesgada traer tantos refuerzos
Primero fue lo de Chupete Suazo, que vino a darle jerarquía y experiencia al plantel. Después la llegada de Facundo Agüero, Gerónimo Poblete, Martín Tonso, Stefano Magnasco y Rodrigo Salinas fueron claves para generar una sana competencia. Y por supuesto la llegada del nuevo cuerpo técnico liderado por Miguel Ponce dio un nuevo aire. Quiero destacar que apostamos por Pancho Bozán, quien se la jugó y vino sin saber en qué terminaríamos luego de la final con Temuco. El agradecimiento a Pancho y su cuerpo Técnico es grande. Seguimos creyendo que es un gran entrenador, pero lamentablemente le tocó administrar esa primera rueda con todas las desventajas que le decía antes. Miguel también se la jugó en un momento difícil, tomó al equipo en último lugar, e hizo un gran trabajo. Conseguimos un objetivo que en el papel era muy complejo. Pero nada de eso es suerte. Y le repito, todo, absolutamente todo, con menos de la mitad de presupuesto que 16 de los 18 equipos de Primera.
Vamos al 2021…
¿Cuáles son las aspiraciones que tiene para la actual temporada?
Este año queremos ir por más y por eso estamos armando un plantel muy competitivo. Renovamos a la mayoría de los jugadores que el cuerpo técnico solicitó. Mantuvimos con nosotros a jugadores como Zacarías, Aguero y Fasson. La llegada de Matías Fernández, Felipe Jaramillo, César Munder, Ángelo Quiñones y Maximiliano Guerrero van en esa línea y todavía quedan varios anuncios. El cuerpo técnico tiene claro cuáles son las pretensiones de esta administración y yo creo que estamos preparados para pelear un cupo internacional. No queremos ir a participar, queremos ir a competir. Luchar arriba en el torneo local y hoy, en igualdad de condiciones, pensar en clasificar a la Copa Sudamericana es un objetivo real.
¿Y en materia corporativa, más allá de lo que pasa en la cancha?
Hemos logrado profesionalizar los cuadros directivos de la Institución. Tenemos un equipo joven, encabezado por Martín Ossandón, nuestro Gerente General, que ha hecho un gran trabajo. Queremos ampliar nuestros socios estratégicos, buscar aliados en toda la región, partners que a través del club potencien la ciudad, actores relevantes que confíen en nuestro proyecto y que vayamos de la mano para convertirnos en uno de los mejores clubes del país.
¿Puede explicarnos mejor de qué se trata?
Queremos ser el actor principal de la ciudad en términos deportivos y sociales. Que todos se sientan identificados. Para eso estamos trabajando en varios proyectos paralelos. Por ejemplo, en el área formativa tenemos la Casa Granate para acoger a nuestros jugadores, tenemos ojos en varios puntos de la región, pues el área formativa es la proteína esencial para el músculo de este gran proyecto. Uno de nuestros objetivos es que en un plazo no tan lejano, nuestro plantel pueda estar conformado por al menos un 50% de jugadores formados en casa. La llegada de Mauricio Salazar para presidir la Comisión del Fútbol Joven en ese sentido es clave. Lo que él representa es un ejemplo para los más jóvenes.
El vínculo con la comunidad pareciera clave….
Lo es. Nos imaginamos que nuestro club, el club de la ciudad, el club más grande y antiguo de la región, debe estar hecho y vinculado con su entorno. Nosotros tenemos una arista de alianza con el sector público y privado, donde la Ilustre Municipalidad de La Serena juega un rol fundamental. Queremos llegar a todos los sectores. Involucrarnos en los colegios, los barrios, generar lazos entre el club y la comunidad ¿Te imaginas que un colegio pueda recibir una visita para brindarles una charla deportiva, que nuestros jugadores le puedan contar lo difícil y satisfactorio que fue llegar a ser profesional y defender el escudo? Todo eso se está desarrollando para ir consolidando el club que queremos.
¿Qué les diría a los hinchas?
Primero les agradecería el apoyo. Y luego, que no se olviden de lo que ha hecho esta administración. Tomamos el club con problemas para pagar los sueldos con una deuda de más de 2 mil millones y hoy estamos al día y con muchos proyectos y acciones en camino.
La última presidente ¿por qué aún no hay auspiciador principal en la camiseta?
Por supuesto que hemos recibido ofertas y negociado, pero no vamos a entregar algo tan importante a cualquier precio. Hoy estamos conversando con dos mineras muy grandes de nuestra región. Ellos entienden que hay un trabajo comunitario, un proyecto y obligaciones que nosotros también exigimos. Queremos que quien esté con nosotros, también quiera reflejarlo aportando en lo comunitario y social.
